Aplica las siguientes buenas prácticas como consumidor financiero para mayor protección:
Cerciórate
De que la entidad con la cual deseas contratar o utilizar los productos o servicios se encuentre autorizada y vigilada por la Superintendencia Financiera de Colombia.
Infórmate
Sobre los productos o servicios que piensas adquirir o emplear, indagando sobre las condiciones generales de la operación; es decir, los derechos, obligaciones, costos, exclusiones y restricciones aplicables al producto o servicio, exigiendo las explicaciones verbales y escritas necesarias, precisas y suficientes que te posibiliten la toma de decisiones informadas.
Observa
Las instrucciones y recomendaciones que imparta la entidad vigilada sobre el manejo de productos o servicios financieros.
Revisa
Los términos y condiciones del respectivo contrato y sus anexos, y conserva las copias que te suministren de dichos documentos.
Infórmate
Sobre los órganos y medios de que dispone la entidad para presentar peticiones, solicitudes, quejas o reclamos.
Obtén
Una respuesta oportuna a cada solicitud de producto o servicio.